Me gusta la ropa, los zapatos, los perfumes y el maquillaje, pero no es lo máximo que me pueda pasar en esta existencia. También, en ocasiones me gusta comer bien, eso que llaman cocina gourmet o cocina experimental o lo que sea. Pero igual, no es lo máximo. Lo máximo es no desear nada y estar tranquilo de la nada. Lo demás, son máscaras hedonistas que nos hacen sentir bien de una manera fugaz. Además, el portarlas te da cierto estatus instantáneo y eso te hace “creer” que eres “especial”. O sea, eso es pura vanidad. Puro perfil TRES del eneagrama. Eso no es elegancia, la elegancia es un estado poético natural. Es encontrar el ritmo interno de nuestro ser en el mundo. El ritmo originario. El ritmo niño. Pero bueno, pueden fingir que hablan bonito, que se sientan bonito y que caminan bonito. Eso no es, más que pura falsedad. Estos días estoy aprendiendo a caminar como un ser bendecido por el multiverso. Como alguien que se sabe mortal y no tiene miedo. Como alguien que conoce la nada, y por cierto;  espero que me salga bien, y al rato no vaya a parecer una “iluminada” jajajajajajajajajajajajja.

Pd. En el Tao sè que vengo de la nada y voy a la nada.