No eres el precursor de nada.

Eres un rapaz aún niño

Que tiene por misión buena,

Por misión sonriente y sosegada

Tener al cuello un cordero pequeñito

(…)

Eres un niño adentro de todos los niños

Eres el deconstructor estoico

Que gana todas las misiones del planeta

Sonrisa, felicidad

Tener al cuello atascado de metáforas.

(…)

Todo lo que es realidad o ilusión

Por el niño ser que le pertenece,

Y sus buenos y santos modos

“Con el corderito en la mano”

Como te vio Catullo Cerense.

…

Todo es realidad y ficción, niño

No hay nada diferente.

Nombrar a la ficción transporta

A lo real

Y pensar en lo real traslada a la ficción

Las palabras crean el multiverso

Como lo dijo el león, a propósito

De alguien nombrado Zaratustra.

3.

Pero descendamos a tierra,

Que, por ahora, el cielo descienda a tierra,

Porque antes de eso se insinúa la muerte

Hay muchas cosas desconocidas en tu vida

Tienes mucha suerte.

!Niños! Tenemos, fortuna, sabiduría,

Placer. Amor. Niños estamos esperando todos

Los momentos de todos los momentos en un solo

Momento. Blanca discreción de sifìlos

De aire mediterráneo decoran nuestras

Vértebras !Saciedad ad infinitum in parvum!

¿Cómo ponerle fin al mago que todos llevamos dentro?

No puedo dejar de nombrar el camino de la serpiente, el adivinario, y el Pentagrama Fronterizo. El libro del poeta portugués en mis rodillas, las frecuencias solfeggio en 725 Hertz y el brillo de ojos al atardecer. “Todas las historias futuras son felicidad instantánea” “Todo el Pentagrama Fronterizo abunda de saciedad” Entonces, construir la episteme futura de todas las ciudades sol; no constituye arbitrariedad alguna en esta noche de Mayo, mientras borro toda signatura que no constituya infancia y plenitud. La viajera querúbinica ha resucitado varias genealogías abstractas de oraciones afirmativas. La ciudad sigue llamándose como antes y como siempre: Tj ciudad brillante. All you need is love. Tengo toda la fortuna de todos los siglos entre mis labios. Callar es siempre la mejor lección astral. Al volver del post.doctorado lo único que hice fue volar. Callar. Buscaba sobre todo otras realidades ausentes de lenguaje. Ese día entre los lunares de sus hombros las encontré y callé. La ciudad sigue harta de felicidad. Niño adentro de mi niño: Somos los precursores de todo y nada. Hay un eco que revuela: luminiscencia embrujada.

Entonces, sólo brillamos.

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